Texto y fotos: Jaqueline Viedma
Ciudad de México. El día de ayer, 25 de noviembre, «Día Internacional de la Erradicación de la Violencia Contra la Mujer», mujeres organizadas salieron a las calles para exigir un alto a la violencia machista, nombrar a las que nos han arrebatado y hacer un llamado a las autoridades para que haya JUSTICIA completa en todos los casos.
En la Ciudad de México, desde muy temprano negocios, monumentos y edificios fueron tapizados con vallas metálicas y de madera, por avenida Reforma, Plaza de la República, avenida Juárez y 5 de mayo, en estas mismas calles y previo a la llegada de mujeres organizadas, colectivas, madres y familiares de víctimas de feminicidio y desaparición, así como sobrevivientes de distintas violencias, los contingentes de policías comenzaron a formarse.
La Colectiva de Hilos instalaron el tejido «Sangre de mi sangre», en las vallas y alrededores de la Glorieta de las Mujeres que Luchan, en donde invitaron a más mujeres a tejer y seguir extendiendo la exigencia de JUSTICIA.
Las mujeres comenzaron a llegar al punto de encuentro de las marchas feministas desde hace más de dos años, La Glorieta de las Mujeres que Luchan, en el que con pancartas, paliacates, diamantina, tambores y figuras hechas por la colectiva XJusticia, se alistaron para salir alrededor de las 2 de la tarde, rumbo al Zócalo de la CDMX.
Este año algunos contingentes avanzaron primero, siempre al frente las madres y familiares de víctimas de feminicidio, desaparición y sobrevivientes de distintas violencias, las mujeres llevaban una lona larga en la cual se podían leer distintos mensajes de exigencia, entre ellos «¡ALTO A LA REPRESIÓN Y LA IMPUNIDAD INSTITUCIONAL!».
Otro contingente lo conformaron las madres que han sido víctimas de violencia vicaria, a quienes debido a la corrupción e impunidad, sus hijos han sido separados de ellas, como en el caso de Paulina, quien desde hace 4 meses el padre de su hija se la quitó y no le ha permitido verla ni convivir con ella, las instancias a las que ha recurrido han dilatado mucho, por eso ayer asistió a la marcha para exigir que su hija le sea devuelta.
También, mujeres organizadas y personas solidarias se unieron a la marcha para exigir un alto a la guerra, «Por una Palestina Libre y Socialista», «¡VIVA PALESTINA LIBRE!», «No es una guerra, es un genocidio», fueron algunas de sus consignas.
Amnistía Internacional México se hizo presente en la marcha, acompañados por la Batukada «Dambo», caminaron hasta el Zócalo, los tamborasos, el baile y la expresión artística encendían la marcha, por momentos, se detenían y el mismo contingente animaba su marcha al ritmo de la batukada.
Mujeres de la colectiva Gordas Expansivas marcharon en contra de la gordofobia, la violencia médica, en sus pancartas se podían leer mensajes como: «TU GORDOFOBIA MATA», «Por las muertas por TCA (trastorno de conducta alimentaria)», «Tu asco y desprecio a mi cuerpo gordo, es violencia colonial».
Los primeros contingentes comenzaron a llegar a la plancha del Zócalo, en la que un templete y el micrófono les esperaba para que las mujeres que así lo quisieran hicieran su exigencia extensiva hacia las asistentes a la marcha, unidas, sabedoras de lo que las instaba a estar ahí, por JUSTICIA, alto a la represión, libertad para las presas políticas, alto a la revictimización de las autoridades y construir un mejor futuro en el que mujeres de todas las edades se sientan seguras y sepan que nunca estarán solas.
Más tarde, alrededor de las 4 de la tarde, el colectivo de Madres que Luchan, No es Una Somos Todas, Las Constituyentes Mx, el Frente Nacional Para la Sororidad y Women On Fire, llegaron para marchar rumbo al Zócalo.
Las madres y familiares de víctimas que iban al frente de este encuentro, se compartían el micrófono para contar el motivo que las hacía asistir a la marcha, una de las asistentes fue Mariel Albarrán, quien al tomar la palabra, denunció que lleva más de 4 años denunciando violencia sexual infantil cometida en contra de sus dos hijas, «lejos de ser protegidas, somos perseguidas por el Estado, actualmente, tengo 7 carpetas de investigación por atreverme a alzar la voz y no detenerme en la búsqueda de Justicia», el señalado por estos delitos es el ex magistrado Manuel Horacio Cavazos López.
Las infancias también se hicieron presentes en la marcha de este 25N, algunos contingentes fueron encabezados por ellas, quienes gritaban «¡CON LAS NIÑAS NO!», «¡NO ESTAMOS SOLAS!», a la altura del museo Memoria y Tolerancia, madres con infancias pintaban un mural en piso, la marcha se detuvo unos instantes ahí, y las asistentes les agradecía su solidaridad por este acto.
A pesar de no haber algún registro de percance mayor entre policías y asistentes a la marcha, los últimos contingentes iban rodeados por policías de la Ciudad de México, el reclamo de las madres hacia estos también se hizo presente y algunos contingentes cortaban consignas en rechazo de la presencia de policías a la marcha, el gobierno de la Ciudad anunció que serían mil policías quienes estarían a lo largo de este trayecto.
A la llegada de los últimos contingentes al Zócalo, las mujeres comenzaron a hacer círculos, en los que hablaban de sus casos, algunas comenzaron a abrazarlas después de cada relato, madres de víctimas de feminicidio nombraron a sus hijas.
En otro de los círculos formados por mujeres, Prania Esponda acompañada de Olimpia Coral, con una bocina y un megáfono, rapeó entre aplausos y el coreo de las asistentes quienes le agradecieron por el concierto luego de casi una hora de camino y una lucha que no se queda solo en el 25N, trasciende todos los días, se acompaña y exige a diario.
Las Equilibristas 